domingo, 18 de enero de 2009

Las uñas de los pies a través de los siglos

Desde la antigüedad más antigua viene siendo costumbre hacer algo con las uñas de los pies  cuando están largas, por ejemplo cortárselas, por ejemplo arrancárselas… Vamos a hacer un repaso a través de la historia, de esta práctica legendaria:

 

1. Unnio Piubio, nacido en Roma en el 15 d. C. y muerto en Roma devorado por 3 leones fieros y una cristiana hambrienta, ya usaba de recortarse esos molestos trozos de cuerpo que a uno le crecen de los dedos de los pies; su forma de cortarlas era aplicando sus propios dientes, pero ya se sabe, los romanos además de esto de los acueductos, eran bastante flexibles.
 
2. Se tienen noticias sobre esta misma ténica en la corte de Ricardo Orejón en la Inglaterra medieval; pero como en Inglaterra eran bastante menos flexibles, se las cortaban los unos a los otros; por tanto no era infrecuente ver en la corte inglesa de la época a un vasallo con el pie de su señor en la boca, ni a señores con el pie de una prostituta (que allí se llamaban de otra forma que ahora no recuerdo, porque en la Inglaterra medieval, además de hablar en otro idioma, tenían un alto nivel de palabras cultas) en la boca. De aquella época han llegado hasta nosotros diversos bocetos que retrataban este acto, por ejemplo, dibujos donde mucha gente en el salón de la corte tenía el pie de otro en la boca. Se llegó a instaurar oficialmente como festivo el día de cortarse las uñas de los pies, una vez cada tres meses. Esto sólo se daba en la corte, lógicamente, pues en el campo en la Inglaterra medieval, los campesinos solían dejárselas largas para labrar los campos (este último caso son solo suposiciones a raíz de frases escritas en sevilletas de bar y encontradas por un investigador borracho en la costa inglesa en el s. XIX).
 
3. No vuelve a haber datos documentados de este hecho hasta el s. XVI, en que el señor Ciseauxium, en la Bretaña francesa, inventó un instrumento que su esposa llamó "tijeras", en honor de su esposo, claro, pues ella a él en la cama nada de nada, pero en cuanto se trataba de entrevistas de radio o prensa escrita… Las tijeras se inventaron con esa utilidad, aunque después y sobre todo en la actualidad se les ha dado otro mal uso, por ejemplo matar, pero eso es otra historia. Realmente las primeras tijeras eran de palo, de madera de un cerezo que el señor Ciseauxium tenía delante de la ventana de la salón, y que le molestaba las vistas, pero después se fueron construyendo en diversos metales, con el fin, como ya hemos dicho, de ser útiles para cortar uñas y para clavar en el cogote de algún vecino, y la madera se fue olvidando. Y este invento francés, como decimos, ha perdurado hasta nuestros días.

 

Pero además de todos estos casos bien documentados, hay otra serie de apuntes que son sólo eso, apuntes, pero que ilustran perfectamente las técnicas que seguramente utilizaban otras civilizaciones para hacer desaparecer las uñas de los pies:

 

-         se sabe por pinturas rupestres dentro de las pirámides, que la antigua civilización egipcia se machacaba los dedos de los pies con unas piedras especiales, muy duras y resistentes, piedras de pirámide, concretamente, para que las uñas no crecieran

 

-         en una miniatura de un libro de horas del siglo XIV, se puede apreciar cómo un esclavo tira de la uña de uno de sus señores, y de esto es de suponer que también era una práctica extendida en aquella época, el arrancar uñas para que no crezcan… Y realmente es que cada uno hace con sus uñas lo que quiere…

 

-         el caso de la labranza de la tierra en la Inglaterra medieval ya está comentado

 

-         otro caso llamativo es el de la civilización china arcaica, que en vez de cortarlas, pues creían que esto hacía enfadar a los dioses, las doblaban hacia dentro haciendo formas, y luego cuando alguna uña por casualidad se rompía y se caía, la colocaban en la estantería del salón para observarla por las tardes (no tenían tele), pues sus formas caprichosas llamaban bastante la atención. Solían invitar a familiares y amigos y celebrar un gran banquete cuando una uña se les caía.

 

Otro tema importante es el de cómo hacer desaparecer las uñas cortadas… En eso hay diversidad de técnicas también, desde engullirlas hasta hervirlas y tomar un consomé… Pero esto es digno de otro estudio aparte.

 

La conclusión a la que he llegado con este trabajo de investigación es que cada civilización es distinta a la otra en cuanto a costumbres, pero que hay algo innegable: todas las etnias tienen uñas en los pies y estas uñas crecen y hay que hacer algo con ellas. Es inevitable. Forma parte de la evolución de la raza humana.

 

Julián Montilla

(este es un trabajo de investigación dedicado a los profes y compis del cole)

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